BLOGGER TEMPLATES AND TWITTER BACKGROUNDS

sábado, 17 de noviembre de 2012

25. Cartas de coloquiales


¿Es posible que, a estas alturas, no creas en mí?
¿O te sientas débil ante la distancia y ante el tiempo?...
Tú no eres ni circunstancia ni accidente
-te lo he dicho-, tú eres intimidad, esencia.
8 de octubre de 1948
Cartas coladas de un personaje de poesía
Sabines le escribe a Chepita.




¿Qué no te escribe la pluma que lo que en la vena remanece sea una sangre pesada de azúcar? ¿Es que no te has dado cuenta? Me pesan los ojos, las manos, el cuerpo entero y la noche es tan ligera a tu lado, te guardo como el persimonio para consumirte en invierno y predicas descuidos y agravios míos, tú, fruto de un largo tiempo de complicidades. No, hojarasca revuelta de cabellos, no, ventana alumbrada del buen día. Todo menos eso.
Comprendo que un par de kilómetros separen eternidades a las personas, pero las demás personas no son eternidades, y tú y yo nos volvimos eternidades separadas con el tiempo, es difícil que alguien no diga que exististe tú y difícil que digan que no existí yo, sí existimos ambos y podemos permanecer como pergaminos de un tal " Así pasa..." de una florecilla Amariliana. 

Lo triste es creer que algo así cansé, embrutezca o arranque de las huellas dactilares un tiempo construido de confianza, de una amistad insólita y de un reflejo de lo que sólo yo llamo amor.

Tal vez somos leyenda... es decir.... las leyendas no son vecinas, no se conocieron en el colegio, tampoco fueron a comprar un helado y cayeron inmediatamente atolondrados con golondrinas sobrevolando los hombros; no es una historia simple, de hecho es compleja. Los personajes como relicarios tienen pasado y permanecen cubiertos por el polvo y otros dueños los cuelgan cerca de su corazón, hasta que finalmente se encuentran los dos solos encerrados en un baúl, oxidados, rasguñados y entonces comprenden que están en el sitio correcto y podrán pasear juntos entre baratijas y de esas curiosidades que se dan en tiendas novedosas, así hasta que el tiempo venza y sean vendidos a otra eternidad siguiendo igual de oxidados, porque nos hemos renovado tantas veces que ya no queda nada que renovar. No somos como los amorosos de Sabines, yo no lloraré porque no salvemos el amor, porque yo sé que el amor nos salvará a nosotros.

No comprendo como juega el tiempo ni que dados tiran las circunstancias, sólo sé que a veces tengo suerte y me sale una H en el Dado y Otras veces el número es una fecha próxima.  

Sin alargar más esto, sólo quisiera que supieras que cosas como esta no son parte del "soap opera", estas cosas son serias, de las que menguan la esperanza de vida a la mitad; porque eres la persona que complementa mi falta de existencia, porque soy yo quien quiere creer que dos locos como nosotros, suicidas, maníacos, fracasados de letras, que somos nosotros sobreviviendo a los dramas diarios que creen vivir los demás, que somos nosotros sobreviviendo a los demás, que somos nosotros... nosotros and nevermore.